Hace un frío
que pela, apenas puedo escribir, tengo los dedos congelados. Son las 7 de la
mañana y me voy a trabajar, con lo cual hoy sólo os dejo esta receta y os deseo
un estupendo día.
Ingredientes:
- · 800 grs. de níscalos
- · 150 grs. de jamón serrano
- · 1 cebolla
- · 4 dientes de ajo
- · 2 ramita de perejil
- · 1 cucharada sopera de harina
- · 100 ml de vino blanco
- · 150 ml. de agua
- · 6 cucharadas soperas de aceite de oliva
- · Sal
- · Pimienta negra
- · 1 cayena ( muy recomendable)
Elaboración:
Limpiamos
bien los níscalos, los podemos cepillar y limpiar con un trapo mojado, que es
lo recomendable, aunque cuando traen mucha tierra hay quien los pasa bajo el
grifo de agua fría, procurando que caiga poco caudal para que no los estropee.
Le cortamos el pie y los troceamos.
Pelamos
y picamos la cebolla en juliana.
Pelamos
y picamos 3 de los ajos.
En
una sartén calentamos el aceite de oliva y sofreímos la cebolla y el ajo,
cuando esté dorado agregamos el jamón partido en taquitos, rehogamos y añadimos
los níscalos, dejamos cocinar durante unos 5 o 6 minutos. Añadimos la harina, le damos unas vueltas y regamos con el vino y
dejamos cocer un par de minutos, agregamos el agua y ajustamos de sal y
pimienta (si se queda sin salsa mientras cuecen agregaremos un poquito más de
agua).
En el mortero machacamos el ajo que nos queda
junto con unas ramitas de perejil y una guindilla cayena y lo agregamos a los
níscalos. Dejamos cocer hasta que el hongo esté tierno. Espolvorear de perejil
fresco antes de servir.
¿Quién dijo frio!!! Mis dedos también se resisten, pero con este plato tan contundente y calentito...mmmm!! Y un buen pan, cómo no, para el mojeteo, que tiene que ser de lujo!! Un beso.
ResponderEliminarPara amantes de las setas como yo, esto es una delicia.
ResponderEliminarDe los de llevar un buen pan y no parar hasta que no quede nada.
ResponderEliminarTemporada de setas, por aquí tenemos muchos buscadores espero sepan lo que hacen, jajaja
ResponderEliminara mi particularmente no me apasionan, suelo comerlos porqué es muy típico añadirlos al "arros brut" pero a Tomás le gustan mucho y para él lo que sea ;) y así en salsita mejor que mejor.
Besitos
Buenos dias preciosa!!
ResponderEliminarNíscalos, que delícia!! EL otro día cuando fuí a la frutería y los ví no me pude resisitir y compré, los hice en le horno con un chorrito de aceite y una pizca de sal maldon, es que me supieron a gloria, recuperé el sabor de mi infancia que tanto me gusta.
En salsa no los he comido pero tienen una pinta exquisita.
Mil besos y feliz día
ufff que pintazaaaaa
ResponderEliminarUna receta que no necesita presentación, las fotos lo dicen todo. DELICIOSA.
ResponderEliminarUn besito desde Las Palmas.
Si, si menuda pintaza!!
ResponderEliminarVaya plato...
ResponderEliminarEs una maravilla de plato. Yo siempre los he cocinado con tomate, así que ya te puedes imaginar lo fantástica que me parece tu receta.
Y con éstas fotos tan suculentas... madre mía!!!
Que maravilla chelo, y encima picantitos como me gustan a mí. Eres mi ídola!!!, Besos
ResponderEliminarMe encantan estas setas, y en salsa deben estar para chuparse los dedos. Como se nota el descenso del termometro jeje. Besos!
ResponderEliminarAna
Qué pinta tan exquisida!!! Pena que con el frío de estos días ya no encontraremos muchos rovellons!!!!
ResponderEliminar¡Fantástica! Qué buena receta, Chelo. Me gusta por las setas y por lo novedosa que es, porque nunca los he visto en salsa, y creo que no se me hubiera ocurrido. En casa nos gustan prácticamente todas las setas, aunque especialmente a mi. Hoy, sin ir más lejos, la comida que tenemos lleva setas entre sus ingredientes, y verá la luz algún día.
ResponderEliminarLos níscalos me traen muy buenos recuerdos. Los probé por primera vez siendo jovencita. Mi hermano y yo nos fuimos de vacaciones al Pirineo leridano con unos tíos y primos, y uno de los días salimos a coger níscalos, o rovellons por aquella zona. Luego los hicimos en una barbacoa con ajo y perejil. No creo haber comido jamás setas más ricas, y ni tan siquiera los propio níscalos, o es que soy yo la que sin querer los enmascaro con mis buenos recuerdos, porque aquella vivencia fue extraordinaria.
Un beso. ¡Feliz día!
Solo??? Te parece poco. Riquísimo.
ResponderEliminarUn besín.
¡¡¡¡Qué ricccooo!!!!!!!! Me encantan los hongos: todos y preparados de cualquier manera.
ResponderEliminar¿Te paso un poco de nuestros 36°, querés ?? Ja-ja!!
Vaya sartenada de setas, que ricura!!! yo este año no encontré ni una, así que ni las he probado!!!
ResponderEliminarun besazooo
Qué deliciosos se ven. Como son tan carnosos, los níscalos hacen por sí solos una buen plato. Ni acompañamiento ni nada. No lo necesitan.
ResponderEliminarEstupenda receta :)
Me parece una entrada deliciosa, llena de sabor, aroma y color inconfundible propio de mi tierra...pero con una pega, no puedo comer niscalos, ni champiñones, mi cuerpo no tolera este tipo de productos...y mira que me gustan!!!
ResponderEliminarBesos
Maravilloso guiso de níscalos, cuánto sabor. Besos
ResponderEliminar¡Madre mía, qué buenísima pinta! tiene que ser un vicio. para comer con pan y vino, un no parar.
ResponderEliminarBesos.
¡¡¡Vaya pinta tiene eso!!! Con eso y un buen pan que alegría de comida.
ResponderEliminarme gusta mas un guiso que a un tonto,con lo cual babeo viendo este pedazo de plato!
ResponderEliminarsaludos.
mira que he comido setas este otoño, pero es que los níscalos no los he catao snif snif
ResponderEliminarte ha quedado un guisito estupendo, qué envidia me das!!
un besazo
Ñam! Irresistible y absolutamente ideales!
ResponderEliminarBesos.
ayer publiqué yo una receta de estofado de níscalos.......hay que bueno es el otoño cuando se encuentras setas verdad?
ResponderEliminarbesos
La hago seguro!!! vaya manera tan rebuena de comer rovellones! he hecho varias veces ya este año pero ésta manera me encanta así que el finde cae seguro. Muchas gracias por hacer el esfuerzo de compartir la receta tan temprano!!!
ResponderEliminarUn besito reina,
Angi
Cómo me apetece probarlos! por aquí no se suelen encontrar, pero puede que mi hijo me traiga uno de estos fines de semana, así que ya sé qué hacer con ellos.
ResponderEliminarUn besico.
Chelo que maravilla de plato, es para quitarse el sombrero, pero de verdad, te ha quedado divino, los niscalos los considero un manjar, y con este platico se quita asta el frio. Mil besicos
ResponderEliminarQué requetebuenas estas setas con esa salsita para mojar pan. Los guisos mas sencillos son a veces los mejores.
ResponderEliminarbesotes
Chelo, me encantan los níscalos!
ResponderEliminarTu receta es una delicia, de lujo!
Besitos,
Aurélie
Por las mañanas hace mucho frío... no dan ganas de salir de la cama! qué ricos revollones, me dan mucha envidia :) besos
ResponderEliminarCon esta delicia en el plato se perdona hasta el frío!
ResponderEliminarestan deliciosos.
ResponderEliminarwww.animoyesperanza.com
En la sierra de la pila tenemos este año muchos
ResponderEliminarVaya salsita rica que les has hecho!! Deliciosos deben de estar esos níscalos! Besos
ResponderEliminarEs que es horrible el frío que hace eh?
ResponderEliminarTu platito buenísimo, pa hincharnos a mojar pan y entrar en calor jajaj
Besazos.
Esto hay que probarlo, sin duda toda una delicia.
ResponderEliminarPerfecta para este tiempo.
Un besazo
Te han quedado estupendos.
ResponderEliminarY si que hace un frío que pela......... las masas no suben ni a la de tres!!! ;-P
Besos.
Te juro que dan ganas de meter el pan ahi!, que delicia, se ve maravilloso!
ResponderEliminarEspero que pase un poco el frío por ahi.
Besitos
Hoy he comprado varias clases!!! así de jugositos no los he hecho pero me han gustado para guarnición o para lo que sea!!! besotes
ResponderEliminarme guardo la receta, me hubiera venido genial el domingo pasado cuando tenía delante cinco kilos de rovellones (rebollones en Aragón) ;)
ResponderEliminarBesos. Paula
¡Cheloooo! Adivina lo que hay de comer en mi casa ... ¡Sí! Revisando la receta, creo que te has saltado el punto en el que hay que añadir la harina, y que imagino que será justo antes de incorporar los níscalos, ¿no?
ResponderEliminarYa te contaré ...
Besos.
Yolanda, es verdad se me ha olvidado, hay que ponerla antes de verter el vino, cuando los níscalos ya han rehogado, porque sino la seta no se cocinara como debe. Asi que sofrito, añades los niscalos, los dejar cocinar unos minutos, entonces la harina, rehogas y riegas con el vino.
EliminarVoy ahora mismo a ponerlo en la receta.
Gracias preciosa