No he podido resistirme, me he convertido en una asaltablog!, y lo he
hecho con nocturnidad, alevosía, y con unas ganas de juerga que no os quiero ni
contar. Y es que es tan divertido!, os dejo el enlace para que no os perdáis un
detalle pincha aquí y te
llevará a Gastroandalusí, donde Conchy te lo explica todo.
Este mes asaltamos Al
Calor del Horno y yo me he traído sus Poleás.
“Tres nombres tienen las condenás: gachas, puchas y poleás” en mi casa siempre se han llamado gachas y
las hemos comido casi exclusivamente el día de Todos los Santos. En casa de
Bego se llaman Poleá y se comen en días de lluvia. Aunque difieren en algo las
recetas, a las dos las acompañan muy buenos recuerdos, ligados a nuestra
infancia y a nuestras abuelas y madres.
Lleva su receta en mi carpeta de pendientes desde el mismo día que la
publicó, nada mejor que meterme en su cocina y asaltarla para traerme una
receta con sentimiento (Ni que decir tiene que ya que estaba en su casa, de incógnito,
dispuesta a robar, también me he traído unos platos, vasos, un aparador, una silla,
un par de tiestos…, eah, unas cosillas de atrezzo para el blog)
Es uno de esos platos que podríamos incluir dentro de la cocina de
subsistencia. Harina, algo de aceite o manteca, agua, pan duro y azúcar,
ingredientes simples que se conjugaban para dar un plato caliente, contundente
y goloso. Dependiendo de los tiempos se podía sustituir el agua por leche y
añadirle unos frutos secos. O hacerlas con agua muy espesas y regarlas con
leche (estas son las que siempre hemos comido en casa).
Me resulta admirable como se apañaban y apañan nuestras abuelas. Nos
han dejado, probablemente sin saberlo, la mejor de las herencias.
Ahora la receta de Bego, la he seguido prácticamente al pie de la
letra, tan sólo me han faltado las nueces, mi bote estaba vacío, ;)
Ingredientes:
Para dos raciones
2 cucharadas soperas de aceite virgen extra
½ cucharadita de matalahúga (anís en grano)
2 cucharadas colmadas de harina de trigo
1 cucharada sopera de azúcar
300 ml. de leche
1 rebanada de pan cortado a cuadraditos
nueces (yo no le he puesto)
Azúcar y canela para espolvorear
Elaboración:
Cortamos el pan y lo freímos en una sartén con abundante aceite de
oliva virge extra. Lo sacamos a un plato con papel de cocina para retirar el
exceso de aceite.
En una sartén calentamos el aceite de oliva, echamos el anis, lo
movemos e incorporamos la harina, la dejamos tostar ligeramente, para que
pierda el sabor a crudo y vamos incorporando poco a poco la leche, moviendo sin
parar con una cuchara de palo, evitando que nos salgan grupos, añadimos el azúcar
y dejamos que cueza un par de minutos, hasta que espese. Si nos gustan más
claritas añadimos más leche.
Vertemos sobre los cuencos y espolvoreamos de azúcar, canela,
cuscurros de pan frito y nueces.
¡A disfrutar!
Oye..... devuélveme los platos, que tengo a los niños sin desayunar!!!!!!!!!!!!!!
ResponderEliminarTe han quedado maravillosas, poco más te puedo decir.
Mil gracias por tu asalto y muchos besos!!!!
Chelo ,no conocía esta receta, por algún motivo se me despistó del blog de bego, pero ahora viendo el resultado te tengo que decir que gracias por robársela, ya que tiene una pinta estupenda, además este tipo de recetas de reciclaje me vuelven loquita.
ResponderEliminarMuchos besos y gracias por compartir
Hoy empiezo tabla por el final!!! Te ha quedado un asalto riquisimo
ResponderEliminarBienvenida a esta locura Chelo, que nos gusta un sarao jajajaja. En mi casa, como en la tuya...son gachas, espesas, con leche y el día de Todos los Santos, aunque en esto último no estoy muy de acuerdo, porque ahora mismo estoy pensando en cenar unas gachas...te han quedado deliciosas y el atrezzo inmejorable.
ResponderEliminarTe ha quedado riquísimo este asalto!! Me encanta las foto, es preciosa! Besitos
ResponderEliminarQue ricas que están estas gachas y te han quedado fabulosas, enhorabuena!!
ResponderEliminarLlámalas como quieras, lo importante es lo buenas que deben de estar. A mí estas cosas tipo papillas me vuelven loca. La verdad que se me había pasado por alto esta receta, pero ya me la guardo a buen recaudo :) Un besito
ResponderEliminarQue recuerdos y que gachas... en mi casa no se solían hacer, no son típicas de mi zona, pero desde luego a mí me encanta comerlas igualmente...
ResponderEliminarNo tengo ni idea porque no he visto esta receta en el blog de Bego!!! Tienen que ser una delicia!!!
ResponderEliminarUn besito,
Sandra von Cake
Se parecen a unas que comia yo de pequeña. Un asalto fabuloso y unas fotos preciosas. Bss.
ResponderEliminarEsto del Asalta Blogs me parece una iniciativa estupenda y divertidísima, ojalá tuviese tiempo para participar.
ResponderEliminarLas fotos te han quedado preciosas Chelo y me has encendido la lamparilla de las gachas, que nunca las he probado.
Besitos
No conocía esta receta pero tiene una pinta estupenda.
ResponderEliminarBienvenida a la banda.
Besitos guapa
Deliciosas gachas, que es como las llamamos nosotras...
ResponderEliminarLas fotos, maravillosas.
Un abrazo.
Que ricas, mi padre se las hacia muchas noches para cenar, y yo siempre terminaba comiendo mas que el jajajaja, un gran asalto.
ResponderEliminarBesos
¡Bienvenida a esta pandilla de sinvergüenzas! Es que mira que nos gusta un lío...
ResponderEliminarEn mi casa, como en la tuya, también son gachas, las de todos los santos. Me hacen viajar a la niñez...
Que me encanta verte también por aquí.
Un besazo.
No conocía esta receta, pero la verdad es que me apetece probarlas después de ver tu post! que pinta!!! Besos
ResponderEliminar¡Oooooh, por favor! ¡Pero qué cosa más rica, madre mía! Las gachas son como una bechamel, pero dulce. Ains, que estoy perdida con haber visto tu asalto, porque si me gusta la bechamel, en dulce ya ni te cuento. Espera, que estoy hiperventilando. Ja ja ja.
ResponderEliminarEsta es una de esas tantas recetas que ni por asomo creo que hubiera hecho nunca en mi cocina porque las raíces de mis padres son del norte y no tocan el sur para nada. Pero ahora llego yo y me pregunto que cómo puede ser que sepa de recetas de miles de kilómetros de distancia, allende los mares, y no de estas gachas.
Enamorada me voy :))
Besos y feliz semana.
Qué original y delicioso asalto, me resulta super apetecible!! Un asalto super acertado, me gusta!!
ResponderEliminarUn abrazo!
Que delicia y que gran asalto!
ResponderEliminarSaludos de Un Dulce Escape
Bienvenida al reto Chelo!! Y menuda manera de empezar, pedazo de asalto has hecho, te han quedado unas poleás de vicio!!
ResponderEliminarBesos!
Me las preparo para merendar!!
ResponderEliminarNunca he probado estas gachas dulces, pero el aspecto es super apetecible!! Te han quedado de vicio!!
ResponderEliminarBuen asalto!!
David de LA COCINA PISTACHO
Bienvenida Chelo!! No sabes lo contenta que estoy de tenerte en esta pandilla de chorizos! Tienes que elegirte un "alias malvado para firmar tus atracos jaja Y de las gachas que te voy a decir! te han quedado estupendas son ¡¡¡las mejores gachas del mundo!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! o sea si, que me encantan! Un besazo guapa!
ResponderEliminarHoola Chelo!
ResponderEliminarlas gachas así, SÍ
viendo las fotos entran ganas de ir a la cocina, mirar a ver si llueve o mirar el calendario a ver si ya es el Día de Todos los Santos.
Bienvenida a la banda de Asaltadores de blogs!
bss
esta la tengo pendiente! que rica y que tradicionales son, me encantan. Chute calórico para quitar el hambre!!
ResponderEliminarDe mis recetas favoritas, y que ricas están
ResponderEliminarMe encanta el plato que has escogido. Magnífico asalto :)
ResponderEliminarbesos
Pues espero que en mi carpeta de pendientes estén poco tiempo porque tienen una pinta deliciosa. Enhorabuena por tu asalto :)
ResponderEliminarBienvenida al club de los chorizos! Este plato incomprensiblemente nunca lo he probado, de hecho ni sabía lo que eran las dichosa gachas. Y digo dichosas porque salen en un montón de cuentos así que es de ley de me las haga para merendar ur-gen-te-men-te. Ñam Besísimos.
ResponderEliminarBienvenida al club de ladronzuelos mejor alimentados de la red!! Jejejeje. ¿Te puedes creer que nunca he probado este plato? Y tengo una curiosidad tremenda por hacerlo, ya que en muchos cuentos, obras de teatro y demás he oído hablas de ellas...¡y yo sin probarlas!
ResponderEliminarMuás
Gallecookies
Jolín Bego, menos mal que no se dejó la cartera en el aparador de la entrada porque se la limpias!!! Jajaja.
ResponderEliminarEn mi casa también se llaman gachas y es verdad que son un plato que me trae recuerdos de infancia. Lo comía en casa de mi abuela. De mayor nunca lo he preparado pero viendo lo bonito que queda y la pinta de rico que tiene. Me encanta.
Besitos
Mira que es un plato de los más clásicos las gachas, ya las comían los romanos. Y es que es un plato rico, fácil, sano y nutritivo. Tienen muy buena pinta, debería prepararlas algún día;)
ResponderEliminarBisoux
que bueno y que recuerdos mi abuela solia prepararnosla cuando era pequeña y siempre le pediamos que hechara matalauva jejejej
ResponderEliminarme encanta tu asalto
besos
Vaya! escribí el comentario antes de identificarme y ahora tengo que volver. Por aquí, Berlanga, un pueblo del sur de Badajoz, se le llaman "puchas" y se suelen hacer para el postre de la cena de nochebuena. Se pueden hacer también con manteca de cerdo, friendo en ella la matalahuga o anís en grano, y después la harina, para tostarla un poco, el resto igual que vosotros, aunque también le añadimos, en la cocción, cáscara de limón o de naranja, que puede sacarse al final o dejarla, a mí me gusta dejarla para que suelte aún más sabor,.Por cierto, para evitar los grumos le añado el azúcar después de la harina tostada y al removerlo bien, se suelta mejor la harina y después no dejar de remover hasta que haga los "pucheritos" cuando empieza a hervir. Bureno, muy ¡buen provecho!. Saludos y ¡FELIZ NAVIDAD!
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