Fuera hace frío, todo el día ha estado lloviendo sin parar. Menos mal
que en casa se está a gusto. La chimenea
lleva todo el día encendida y Alejandro no ha parado en ningún momento de
echarle leña, yo apenas he tenido que preocuparme de otra cosa que preparar la cena,
una cena muy especial y no por lo que vamos a comer sino por con quien lo vamos
a compartir, hoy por fin, vuelve a casa Harry.
Repaso la mesa y compruebo que no
falta nada, mantel de hilo, platos brillantes y copas relucientes, preparo las
velas que me trajo de su último viaje, siempre tiene que haber velas sobre la
mesa cuando estamos juntos, debe de ser porque a la luz de las velas hemos compartido
muchas confidencias, secretos, llantos y risas.
Ha pasado tanto tiempo, 30 años
nos separan de aquellos años en Hogwarts. Aún recuerdo cuando de niña fuimos a
casa de los Dursley a conocerle. Las visitas eran frecuentes ya que mi padre y
el Sr. Dursley estudiaron y crecieron juntos, se convirtieron en
íntimos amigos y a lo largo de sus vidas compartieron negocios y amistad. En
cuanto Harry llegó a sus vidas, también lo hizo a las nuestras. Aquel niño
flachucho, de pelo reuvuelto y gafas redonda se convirtió de repente en mi
hermano mayor, del que yo no me quería separar a pesar de que él huía de la
niña pequeña como alma que lleva el diablo. Luego nos trasladamos y las visitas
se distanciaron, ya sólo nos veíamos algunos días en verano (luego se marchaba
con Los Weasley), entonces si que no me
separaba de él y le pedía que me contara tooooodo lo que había hecho desde
nuestro último encuentro, todo con pelos y señales, y él con su sonrisilla y gesto
amable comenzaba a hablar.
Nunca supe si la historia que me
contó sobre como evito que un tal Voldermol se llevará la piedra filosofal que
descubrió Nicolas Flamel, fué real. Cierto es que el Sr. Flamel vino a casa en alguna
ocasión
O como cuando salvó Ginny
Weasley, la hermana menor de Ron, que fué poseída por el horrocrux de
Voldemort.... ¿que habrá sido de Ron?, tengo que preguntarle, hace tanto que no
se nada de él
O cuando participo en el Torneo
de los tres magos. ¡La magía, siempre la magía!
Sonrio mientras pienso cuántas de
aquellas historias fueron reales, Si me oye seguro que se enfada. Cuando se lo
digo me enseña su cicatriz y me dice: ¡mira, aqui tienes la prueba!
Hoy no le acompañara Ginny y tampoco sus hijos, James Sirius Potter,
Albus Severus Potter y Lily Luna Potter. Hoy viene solo, tengo que agradecer
que haya sacado un hueco dentro de su ciclo de conferencias sobre "la
Magia y la Historia: Mitos y Leyendas", mañana temprano volará hacía
Salem, pero esta noche será nuestro.
El asado de cordero casi listo,
lleva horas en el horno, cocinándose en su jugo. La tarta de calabaza enfriándose
en la mesa de la cocina. El jamón y el queso cortado. El vino preparado, ya no
toma cerveza de mantequilla , desde que probó uno de nuestros vinos se ha
vuelto un apasionado de los buenos caldos españoles, creo que los conoce todos.
Y para terminar la
velada la Queimada, disfruta tanto preparándola que creo que sería capaz de perdonar
la cena e ir directamente al fuego y conjuro.
Suena el timbre!, ya
esta aqui!,
A la queimada se le
atribuyen orígenes celtas, pero, según afirmó en 1972 el catedrático de prehistoria
de la Universidad de Santiago de Compostela, Carlos Alonso del Real esto sería imposible,
ya que la destilación del aguardiente en Galicia no puede ser anterior a la
introducción del alambique (de origen árabe) a partir de los siglos XII o XIII,
ya en la Edad Media. Asimismo, siempre según Alonso del Real, el azúcar de
caña, uno de sus ingredientes fundamentales, también lo introdujeron los árabes
en la península ibérica (la difusión de su equivalente de remolacha es muy
posterior, correspondiendo a las Guerras Napoleónicas). Esto le llevó a atribuirle
orígenes medievales a la bebida.
Posteriormente, el
antropólogo Xosé Manuel González Reboredo, afirma que el consumo de aguardiente
—normalmente sin quemar— era habitual en la Galicia rural tradicional, donde
tenía fama como medicina contra el catarro y que en un momento dado —que él
sitúa en torno a los años cincuenta del siglo XX— gallegos residentes en el
exterior empezaron a tomar esta bebida en las fiestas o después de las
comidas.1 En reuniones de este tipo habría surgido la costumbre de acompañar el
consumo de la queimada de conjuros compuestos exprofeso para el momento.
Esta costumbre se
difundió tan rápidamente que ya en el año 1955 el alfarero mindoniense Tito Freire,
creó los recipientes de barro cocido, con forma de tartera y patas en los que
se suele preparar habitualmente.
Todo el ritual de
preparación está dirigido a alejar a los malos espíritus y a las meigas que,
según la tradición, acechan a los hombres y mujeres para intentar maldecirles
ya sea por diversión, por venganza, por algo que han realizado anteriormente, o
por cualquier otro motivo. Cualquier ocasión es buena para realizar una
queimada: una fiesta, reuniones familiares o de amigos. Tras la cena, en la
oscuridad de la noche (que es uno de los mejores momentos para realizarla), los
comensales se reúnen alrededor de la queimada, para animar los corazones y
estrechar los lazos de amistad. Uno de ellos se encargará de darle el toque
final levantando con un cucharón el líquido en llamas y dejándolo caer poco a
poco en el recipiente mientras pronuncia el conjuro, lo que crea un ambiente
muy especial. (Wikipedia)
Ingredientes: Por
cada litro de aguardiente, 120 grs. de azúcar, la piel de un limón y una
naranja y un puñadito de granos de café.
En un recipiente de
barro cocido (el que veis en la foto es el original) se vierte el aguardiente y
el azúcar en la proporción de unos 120 gramos de ésta por litro de aguardiente,
la piel de limón, y naranja y se
remueve. Yo también le añado unos granitos de café.
En el cucharón (yo
utilizo un de madera porque se rompió el de barro que traía el recipiente) cogemos
un poco de azúcar mojada con el aguardiente y le prendemos fuego. Cuando esté ardiendo
lo acercamos despacio al resto del aguardiente para que todo se prenda.
azúcar disuelto), se
mojan los bordes del cucharón con la bebida y se le prende fuego. A
continuación se revuelve lentamente dejando que suban las llamas del alcohol y
creando cascadas con ellas.
Cuando empieza a
apagarse, pero mientras el aguardiente aún arde, se recita el conjuro
En castellano
Búhos, lechuzas,
sapos y brujas;
Demonios, duendes y
diablos;
espíritus de las
vegas llenas de niebla,
cuervos, salamandras
y hechiceras;
rabo erguido de gato
negro
y todos los hechizos
de las curanderas...
Podridos leños
agujereados,
hogar de gusanos y
alimañas,
fuego de la Santa
Compaña,
mal de ojo, negros maleficios;
hedor de los
muertos, truenos y rayos;
hocico de sátiro y
pata de conejo;
ladrar de zorro,
rabo de marta,
aullido de perro,
pregonero de la muerte...
Pecadora lengua de
mala mujer
casada con un hombre
viejo;
Averno de Satán y
Belcebú,
fuego de cadáveres
ardientes,
fuegos fatuos de la
noche de San Silvestre,
cuerpos mutilados de
los indecentes,
y pedos de los
infernales culos...
Rugir del mar
embravecido,
presagio de
naufragios,
vientre estéril de
mujer soltera,
maullar de gatos en
busca gatas en celo,
melena sucia de
cabra mal parida
y cuernos retorcidos
de castrón...
Con este cazo
elevaré las llamas
de este fuego
similar al del
Infierno
y las brujas
quedarán purificadas
de todas sus
maldades.
Algunas huirán
a caballo de sus
escobas
para irse a sumergir
en el mar de
Finisterre.
¡Escuchad! ¡Escuchad
estos rugidos...!
Son las brujas que
se están purificando
en estas llamas
espirituales...
Y cuando este
delicioso brebaje
baje por nuestras
gargantas,
también todos
nosotros quedaremos libres
de los males de
nuestra alma
y de todo maleficio.
¡Fuerzas del aire,
tierra, mar y fuego!
a vosotros hago esta
llamada:
si es verdad que
tenéis más poder
que los humanos,
limpiad de maldades
nuestra tierra
y hacer que aquí y
ahora
los espíritus de los
amigos ausentes
compartan con
nosotros esta queimada.
En gallego
Mouchos, coruxas,
sapos e bruxas;
demos, trasnos e
diaños;
espíritos das
neboadas veigas,
corvos, pintegas e
meigas;
rabo ergueito de gato
negro
e todos os feitizos
das menciñeiras...
Podres cañotas
furadas,
fogar de vermes e
alimañas,
lume da Santa
Compaña,
mal de ollo, negros
meigallos;
cheiro dos mortos,
tronos e raios;
fuciño de sátiro e
pé de coello;
ladrar de raposo,
rabiño de martuxa,
oubeo de can,
pregoeiro da morte...
Pecadora lingua de
mala muller
casada cun home
vello;
Averno de Satán e
Belcebú,
lume de cadáveres
ardentes,
lumes fatuos da
noite de San Silvestre,
corpos mutilados dos
indecentes,
e peidos dos
infernais cus...
Bruar da mar
embravecida,
agoiro de
naufraxios,
barriga machorra de
muller ceibe,
miañar de gatos que
andan á xaneira,
guedella porca de
cabra mal parida
e cornos retortos de
castrón...
Con este cazo
levantarei as chamas
deste lume
que se asemella ao
do inferno
e as meigas ficarán
purificadas
de tódalas súas
maldades.
Algunhas fuxirán
a cabalo das súas
escobas
para iren se
asulagar
no mar de Fisterra.
Ouvide! Escoitade
estos ruxidos...!
Son as bruxas que
están a purificarse
nestas chamas
espiritosas...
E cando este
gorentoso brebaxe
baixe polas nosas
gorxas,
tamen todos nós
quedaremos libres
dos males da nosa
alma
e de todo
embruxamento.
Forzas do ar, terra,
mar e lume!
a vós fago esta
chamada:
se é verdade que
tendes máis poder
ca humana xente,
limpade de maldades
a nosa terra
e facede que aquí e
agora
os espiritos dos
amigos ausentes
compartan con nós
esta queimada.
Se sirve la queimada
caliente, cuando se haya apagado casi por completo, incluyendo también los
granos de café..
Quiero darle las gracias a
mi hermano Juanjo que nos ha enseñado a adorar la queimada.
Esperando haber
pasado el desafío, eso lo tendréis que decir vosotros, me dispongo a retar a:
Lola Homar, Lola en la Cocina ¿Aceptas el
reto?
¿Y si viene a cenar Marco Polo?
¡Tienes 20 días! Tic, tac, tic, tac
¡Continua el Desafío!
He disfrutado mucho tu entrada desde el principio al final, muy interesante y entretenida, la Queimada quizá me cueste hacerla y probarla pero el post ha sido un lujo.
ResponderEliminarBesos guapa.
Que divertido y que lujo tener como invitado a Harry. Además, has acertado de lleno con la receta, nada mejor que esta pozima jejej. Besos!
ResponderEliminarAna
jaja qué divertido, lo has superado con creces. Me encanta el conjuro de la queimada...las llamas, me recuerdan a mi juventud, pasábamos el verano haciendo y tomando queimada!! aunque el sabor es bastante fuerte, nos encantaba, bsss
ResponderEliminar¡Precioso! Te ha quedado una entrada preciosa. Es temprano, pero más tarde me paso a por mi vaso de queimada.
ResponderEliminarBesos.
Has acertado de pleno. Mi querido Harry salió halagado y encantado con tu queimada u me puso al día de vuentro reencuentro.
ResponderEliminarEres grande Cogollos de Agua!!!!
Besos.
Me ha parecido genial como has recreado la escena!!!! y la historia del principio .. Genial!!!!! Harry estaría contentísimo con esta caimada mágica!!!!
ResponderEliminarFelicidades!!! Un reto más superado!
Qué bueno, Chelo!!!! De verdad, yo soy fan total de Harry Potter y, si lo tuviese que invitar a mi casa, seguramente no habría nada mejor que esta queimada, JAJAJAJA; me ha fascinado, tu introducción, tus fotos y la genial idea.
ResponderEliminar¡Qué cena tan mágica!! Preciosa historia, me ha enganchado. Y la queimada... habrá que probarla!! Se aproxima la primavera y las brujas ya están haciéndose con las plumas, las boas.... los rulos, jajaja!! queimada, conjuro y....
ResponderEliminarVaya desafío tan chulo que te has preparado y el que has propuesto.
ResponderEliminarLa queimada sólo la he probado una vez y la verdad es que está muy rica, algo fuerte, pero buena.
Te ha quedado genial con las llamitas en los vasos.
Besos
Ohhh que bonita historia y velada!! Una compañia mágica, son ambiente y receta con secreto. Felicidades me ha gustado mucho. Bss
ResponderEliminarGrandísima historia para una velada y una receta mágica Chelo!
ResponderEliminarUn beso!
Que entrada mas tierna, me encanta la historia que has relatado, se sentía la magia en tus palabras.
ResponderEliminarMil besos
http://lasdeliciasdelourdes.blogspot.com
Anda que no me has puesto alto el listón! Me ha encantado cómo has enfocado la visita de Harry.
ResponderEliminarPor supuesto que acepto el reto, me has sorprendido con tu elección, pero es un personaje que ofrece muchas posibilidades...a ver por cual me decido. Ya tengo trabajo para los próximos 20 días!
Un besazo.
Guau Chelo...Nivelón!! Super recetas y que arte fotografiando..porqué con la llama!!
ResponderEliminarUn besito guapa. MAR, de EQNME
Adoro a Harry, toda la saga me gusta, y qué envidia que haya venido a cenar a tu casa, pero me encanta a la vez que así sea, esa queimada me ha dejado con tan buen sabor de boca. Me encanta este juego y cada personaje me traslada a una historia que me enriquece de alguna manera. Ahora Lola, genial!
ResponderEliminarUn beso guapa
Que maravilla de entrada!!!!!!!!!!!!!!
ResponderEliminarDesde luego te lo has currado y a lo grande, enhorabuena.
Besazos.
Jajaja, ¿puedes crerte que llevo 14 años en Coruña y nunca he probado (menos aún preparado) una queimada? Si viniera Harry a cenar a casa le pediría que la dejara lista en un plis-plas con un hechizo (anque seguramente tendría que chivárselo Hermione...) Si, a Harry le encantaría la queimada ;-)
ResponderEliminarBuena receta y mucha suerte!
Besos
Chelo, ya sabes lo que opino de tu mega entrada a tu invitado tan especial. Ahora que los ánimos están más calmados, y que ha habido una segunda lectura, pensaba que iba a estar más comedida en mi impresión, pero para nada es así. Me sigue gustando tanto como cuando la leí por primera vez hace unas horas. Has logrado crear una historia que una llega incluso a creerse, je je je.
ResponderEliminarAhora te tenemos a ti como intermediaria para hacernos saber sobre su vida, milagro (y nunca mejor dicho) y obras.
Y por supuesto, la caimada ha sido de lo más acertado para la ocasión.
Por cierto, que ese Harry Potter ya sabe lo que es apreciar la buena comida española, eh. Así me gusta, Chelo, inculcando buenas costumbres :)
Besos y feliz semana.
Perdón ... queimada
Eliminar:)
Chelo que bonito, no tiene desperdicio, la narración, la historia de la queimada, la receta y las fotos le has dado un aire especial y magico! me ha encantado1 un besote fuerte!
ResponderEliminarYa podías escribir la vida de Harry Potter después de los libros conocidos, mira que tiene muchos fans que te lo agradecerían y escribes muy bien.
ResponderEliminarSeguro que le encantaría la queimada que le has hecho.
Besos.
pero que bien que os lo pasais!!!! me ha encantado esta entrada. besitos
ResponderEliminarComo ya te dije cuando te lanzaron el reto, yo soy muy muy fan de Harry Potter. Reconozco que me he leido todos los libros y luego me he tragado as pelis, asi que te diré que me has hecho disfrutar muchisimo con tu historia y volver a sentirme dentro de un liro. Enhorabuena.,!!! Yo creo que el reto está mas que superado. Me ha parecido una idea genial, no me hubiera yo imaginado la queimada y por supuesto, qué puede haber mejor que una receta tradicional que requiere un conjuro jajaja brutal. Y por supuesto un magnifico reto el que le mandas a Lola, que le viene como anillo al dedo. Ya casi puedo oler las especias.... Uhmmm a ver, a ver.... Besazos!!
ResponderEliminarme encanta! no conocía la Queimada! que bonito!
ResponderEliminarQue invitado mágico! Una cena y una historia magnifica! me ha encantado
ResponderEliminarSaludos